Los postes impregnados están protegidos contra la degradación causada por factores ambientales como la humedad, los hongos y los insectos. Esta protección les confiere una vida útil más larga en comparación con la madera sin tratar.

Los postes impregnados son más resistentes a los efectos de la exposición a condiciones climáticas extremas, como lluvia, sol y nieve. Esto los hace ideales para aplicaciones al aire libre.

La impregnación de los postes minimiza la necesidad de mantenimiento constante, lo que puede ahorrar tiempo y dinero a lo largo del tiempo, especialmente en comparación con postes de madera sin tratar que podrían requerir tratamientos adicionales para protegerlos.

Los productos químicos utilizados en la impregnación actúan como barrera contra el ataque de insectos y hongos, lo que evita que la madera se dañe y debilite.

La impregnación mejora la resistencia y rigidez de los postes, lo que los hace más adecuados para soportar cargas pesadas, como en infraestructuras eléctricas y de telecomunicaciones.